La AI Artificial Intelligence es un ingrediente cotidiano del Marketing Contemporáneo, que permite “afinar a puntería” en la determinación de a quienes debemos priorizar con nuestros mensajes.

Por ahora no está regulada y permite todo tipo de abusos, en cuanto a la arbitrariedad con que llegamos a los consumidores que queremos convertir en nuestros Cliente$.

Los algoritmos “arbitrarios” son una posibiidad

Si nosotros los usuarios de esta prodigiosa herramienta no nos autoregulamos, lo hará el Estado con su arbitrariedad habitual

Fernando Tomeo (UAustral y UBA)) para La Nación del martes 20 de julio publcó “Una ética para la inteligencia artificial” en la que señala estos peligros de abusos.

“La IA no sólo requiere regulación específica, sino también que quiernes desarrollan la actividad practiquen un comportamiento ético que respete los derechos y autonomía de las personas”

Este tema involucra a los que practicamos el Marketing, con énfasis en “Crecer en Cliente$” sino también a nuestros socios que desarrollan la IA.